Muchas personas mayores en Etiopía se verían forzadas a mendigar en las calles si no fuera por los centros comunales puestos en marcha por la Organización Addis Hiwot Integrated Sustainable Development (AHISDO).
En estos centros tanto las personas mayores vulnerables como sus nietos reciben una comida nutritiva y equilibrada. Los niños que acuden a las escuelas locales comen primero ya que con el estómago lleno es mucho más fácil concentrarse en sus clases durante la tarde. Luego las personas mayores reciben su comida.
Juntos ayudan a cultivar y cuidar un pequeño huerto de vegetales cuya producción la consumen tanto jóvenes como ancianos.
Turunesh, de 100 años, se beneficia de estos centros
“Mi nieta Senait acude a la escuela cerca y el centro le da su comida. Senait me trae la comida del centro porque yo no puedo desplazarme a causa de mi rodilla. Solía acudir al centro cinco días, de lunes a viernes, pero me dañé la rodilla en el baño así que ahora no puedo ir tan a menudo.
El centro le ha comprado libros de texto y el uniforme a Senait. Yo juego con ella y le cuento mi pasado e historias tradicionales y canciones. Le aconsejo que estudie y aprenda mucho. Le deseo éxito y prosperidad ya que quizás no pueda ver su futuro.
Solía trabajar vendiendo Tela (una bebida local) pero tengo problemas de visión y ya no puedo hacerlo. Puedo ver la apariencia física de las personas y objetos pero no puedo identificarlos, y eso me ha impedido seguir cocinando.
Las personas que trabajan en el centro son las únicas que nos ayudan con comida, ¡Que Dios bendiga a aquellos que lo hacen!”