Human Rights Watch ha publicado hace un par de semanas una investigación que ha realizado en Andalucía respecto a las olas de calor señalando como las personas con discapacidad se encuentran en riesgo, ha señalado también como las personas mayores con discapacidad se enfrentan así mismo a muchos riesgos.
Como señala la investigación y se pudo comprobar el año pasado, se lleva produciendo un calor extremo exacerbado debido al cambio climático. Se puede observar a continuación un gráfico del Centro Nacional de Epidemiología del Instituto Carlos III de Salud sobre las temperaturas que se registraron en el verano de 2022.
Esto ha conllevado aquellas personas se enfrenten al riesgo de estrés e incluso muerte por calor a medida que aumentan las temperaturas. Human Rigths Watch dice explícitamente: “las personas con discapacidad a menudo se encuentran entre las más gravemente afectadas durante una emergencia, incluidas las olas de calor, y sin embargo son las que tienen menos posibilidades de acceder a apoyo”.
Señala la investigación, cómo no hay datos de las personas con discapacidad específicamente lo cual complica la labor para saber exactamente el impacto de las olas de calor en personas con discapacidad. Este informe señala el impacto de los efectos de las islas de calor urbanas, que hace que en los entornos urbanos la temperatura se eleve.
Ya no es únicamente el impacto negativo en la salud, sino también en la soledad y aislamiento social. Es importante entender que hay otros factores que pueden empeorar las consecuencias de estas olas de calor como puede ser la pobreza, debido a que viven en edificios que tienen un aislamiento deficiente y falta de espacios verdes o bien la edad, aunque si que es cierto que El Plan Andaluz para la Prevención de los Efectos de las Temperaturas Excesivas sobre la Salud, tiene como objetivo proteger a los grupos que considera que están particularmente en riesgo, como las personas mayores de 65 años entre otros.
Es importante que las personas puedan acceder con facilidad a la información sobre las olas de calor, las precauciones que deben tener y además a lo que se llamó en Andalucía “centros de enfriamiento”, se puede encontrar más información aquí.
El Instituto Carlos III de Salud publicó el año pasado una gráfica desagregando por edad, siendo especialmente relevante observar conforme la edad aumenta, lo hace el numero de fallecimiento con lo cual es especialmente importante seguir sumando esfuerzos de comunicación y concienciación de las personas mayores y las consecuencias de las olas de calor.
Se puede acceder a toda la noticia en el siguiente enlace: https://www.hrw.org/es/news/2023/06/26/espana-respuesta-inadecuada-las-olas-de-calor
