18/06/2018
Por: Bridget Sleap
“La mejor cosa del mundo es poder hacer lo que uno quiere, por que se siente libre. Una persona que no tiene independencia sería igual a estar muerto”comentó una mujer mayor de 71 año de Costa Rica
Tener la capacidad de tomar nuestras propias decisiones y llevar a cabo nuestras vidas como nosotros queremos y acorde a nuestro propios valores y preferencia es necesario para nuestra dignidad, sin importar la edad, es decir esto incluye a las personas mayores.
Todo el mundo tiene derecho a ser independiente y autonómico; pero para muchas personas mayores la autonomía e independencia que tenían cuando eran jóvenes es negada al envejecer. Esto ocurre, porque constantemente las otras personas piensan que los mayores ya no tienen la capacidad de tomar sus propias decisiones, o no se les deja hacerlas.
Las personas mayores nos cuentan que sus derechos están siendo negados
Desde HelpAge, hemos preguntado a las personas mayores que significa independencia para ellos. Está pregunta se hizo a varios grupos de discusión; en Perú dijeron que “la independencia era la libertad de poder decidir por ellos mismos;en Kenya mencionaron“que la libertad es la capacidad de hacer lo que uno quiere, sin ser controlado por otros”.
HelpAge observó que como reflejo de las experiencias personales, la mayoría de las personas comentaron que ellos no tomaban sus propias decisiones en cuanto a sus finanzas, su trabajo, el acceso a servicios médicos, en la vida familiar y en las participación de la comunidad (voluntariados y trabajos sociales).
Una mujer de 63 años de edad de Maurituis afirmó “Yo no tengo control sobre mi dinero y mis recursos.
Otro hombre de 81 años de Tanzania manifestó que “Ahora, ni mis hijos ni los jóvenes de la comunidad me valoran. Toman decisiones sin consultarme, de hecho han decidido vender unas de mis propiedades sin siquiera decírmelo.”
Los adultos mayores también han dicho que hay diferentes personas quienes interfieren en sus derechos de autonomía e independencia. Dentro de estas personas también encontramos al gobierno y a las autoridades locales, a los creadores de política, a los líderes locales y a los proveedores de servicios.
Un grupo residentes de una residencia en Rwanda declaró que eran “Los líderes de la casa, los cuidadores, las reglas y los reglamentos internos de los programas los que les impide tomar decisiones ya sean propias, en cuanto qué comen, qué visten e incluso a que iglesia atienden.”
Para muchos otros adultos mayores, los miembros de su familia son quienes les evitan tomar decisiones sobre su vida diaria y sobre cómo es que quieren vivirla. Un hombre de 78 años de Nigeria comentó “Mis hijos quieren controlar toda mi vida”.
Los participantes expusieron que la discriminación en contra de los mayores y las actitudes negativas de los miembros de su familia impedía que ellos pudieran tomar sus propias decisiones. Así mismo se dio a conocer que muchos adultos mayores perdieron su autonomía e independencia cuando su salud empezó a deteriorarse.
Los derechos de las personas mayores deben ser reconocidos
Cabe mencionar que todas estas aportaciones por diversos grupos de personas mayores, en diversos países no representan necesariamente a todas las personas mayores, pero de lo que no hay duda, es que a muchas personas mayores se les niegan sus derechos de autonomía e independencia. Actualmente no existen estándares específicos sobre estos derechos en la ley internacional de los derechos humanos, por lo tanto es necesario una articulación de estos derechos hacia las personas mayores ahora en la nueva convención de las naciones unidas, es necesario cambiar esto.
Por lo tanto, ¿qué aspectos se necesitan para mejorar los derechos de los mayores, en la nueva convención de las Naciones Unidas?
Debería incluir la libertad de autonomía para la toma de decisiones en las personas mayores, así las personas mayores podrían determinar sus planes de vida lo que les concederá vidas autónomas e independientes según sus preferencias.
En la nueva convención de las Naciones Unidas se debería reconocer a las personas mayores como titulares de derechos en virtud de la ley para que puedan tomar decisiones legalmente reconocidas.
Los derechos de autonomía e independencia en las personas mayores será discutido en el grupo de adultos mayores ante las Naciones Unidas en julio de 2018