En el informe sobre cambio climático presentado por Claudia Mahler se aprovecha y se profundiza en el marco existente de protección a las personas mayores en el ámbito de las catástrofes producidas por el cambio climático.
Es importante subrayar que los informes de la Experta Independiente tienen aportaciones de los estados, las instituciones nacionales de derechos humanos, académicos, organizaciones de la sociedad civil y otras partes interesadas.
Este informe se encuentra en el marco del Alto Comisionado que señalo la triple crisis que plantea (pérdida de biodiversidad, cambio climático y contaminación) y cómo esta crisis era también una crisis de derechos humanos, debido a que las personas que se encuentran en situación de vulnerabilidad, eran las que se encontraban más afectadas de estas cuestiones. La Experta Independiente señala como las personas mayores tienen más probabilidades de morir a casusa de desastres relacionados con el clima (olas de calor, tifones, huracanes e inundaciones) pero también la afectación a su vivienda, el acceso a los alimentos, saneamiento, etc.
Las personas mayores suelen ser excluidas, aisladas y abandonadas en casos de desastres naturales, y esto afecta de forma desproporcionada si se trata de personas con bajos ingresos o bien se encuentra el género como factor diferencial, viéndose así que dependiendo de cuestiones como el nivel socioeconómico o bien el género puede agravarse la situación.
La experta independiente en su informe señala diferentes tipos de catástrofes y las diferentes consecuencias que tienen sobre las personas mayores:
- Huracanes, tifones, inundaciones y otros fenómenos meteorológicos extremos: que los efectos van desde las lesiones inmediatas o la muerte por agua o bien, la destrucción de infraestructuras.
- Olas de calor e incendios forestales: se calcula que en los últimos 20 años ha aumentado un 53% la mortalidad de las personas mayores por las olas de calor, y también el aumento de incendios forestales que afectan a las personas mayores por complicaciones de exposición al humo.
- Catástrofes de evolución lenta: se encuentran dentro de esta categoría la sequía, erosión costera o el aumento del nivel del mar que tienen consecuencias en las vidas de las personas mayores.
Dentro de los marcos jurídicos de protección señala la Experta Independiente que en genera el cambio climático los derechos humanos tienen escaso reconocimiento en el derecho internacional y menos aún si lo relacionamos con personas mayores. Existen normas como el Acuerdo de Paris, los principios de las Naciones Unidas en favor de las personas de edad o bien la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.
La Experta independiente dice: “A pesar de la amenaza que el cambio climático y las catástrofes relacionadas con él suponen para los derechos humanos de las personas de edad, la cobertura fragmentaria e incoherente de los derechos de esas personas en el marco internacional de derechos humanos no proporciona una protección integral frente a los numerosos riesgos a los que están expuestas a causa del cambio climático”.
Pero en el marco de los marcos no vinculantes sí que ha tenido más éxito la inclusión como puede ser en una resolución del Consejo de Derechos Humanos o el Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres, o bien, Las Directrices Operacionales sobre la Protección de las Personas en Situaciones de Desastres Naturales del Comité Permanente entre Organismos entre otros.
La Experta Independiente señala como posibles agravantes la cuestión del género, la pertenencia a comunidades indígenas, las personas con una discapacidad, si la persona pertenece a una minoría racial o étnica y las personas con bajos recursos económicos. Todas estas circunstancias acentúan el efecto de la crisis climática en las personas mayores.
Las dos principales recomendaciones que realiza la Experta Independiente son las siguientes:
«Los Estados deberían adoptar un instrumento internacional jurídicamente vinculante en relación con los derechos humanos de las personas mayores que colme las lagunas de protección en el contexto de las catástrofes inducidas por el clima. Eso ofrecería una mejor protección para los derechos humanos de esas personas. La redacción de una convención de ese tipo debería contar con la participación significativa de las personas mayores en toda su diversidad, sus organizaciones representativas, las organizaciones de la sociedad civil y las instituciones nacionales de derechos humanos.
Además, los Estados deberían aplicar de una mejor manera el actual marco de derechos humanos y tener en cuenta a las personas mayores como un grupo no homogéneo en situación de vulnerabilidad, además de incluirlas en sus procedimientos de supervisión y presentación de informes».
Con lo cual el informe señala como el marco actual es insuficiente y como es importante tenerlo en cuenta a la hora de elaborar leyes, políticas y protocolos para proteger a las personas mayores. En el caso de España se observa con gran claridad la cuestión de las olas de calor y las inundaciones que este 2023 han sido especialmente agresivas.