07/05/2021
Tras el Foro Geración Igualdad de México, HelpAge hace un llamamiento a los líderes, a la sociedad civil y a los movimientos feministas para que no dejen de lado a las mujeres mayores si quieren lograr el deseado progreso hacia la igualdad de género.
En este primer encuentro celebrado a finales de marzo en México, se hicieron llamamientos positivos para la inclusión de diversas voces y se reconoció la necesidad de abordar formas múltiples e interrelacionadas de discriminación durante los debates sobre justicia y derechos económicos. Sin embargo, los problemas de las mujeres mayores no formaron parte explícitamente del diálogo y esto debe abordarse antes de la reunión de seguimiento que se celebrará en París a finales de junio.
El Foro de México podría haber hecho mucho más en un momento en el que la pandemia de la COVID-19 ha puesto de manifiesto cómo las personas mayores son sistemáticamente dejadas atrás. Para lograr la igualdad de género, todas las mujeres y niñas deben tener acceso a sus derechos económicos. Sin embargo, si no se presta atención explícita a las mujeres mayores, la Campaña Generación Igualdad corre el riesgo de que las mujeres no puedan reclamar sus derechos cuando lleguen a una edad avanzada.
A pesar de que su trabajo sigue siendo invisible, las mujeres mayores contribuyen de forma muy significativa a la economía y deben tener derecho a protección social y trabajo decente. Por ejemplo, los cuidados no remunerados que prestan las mujeres mayores apoyan el empoderamiento económico de las generaciones más jóvenes. Esto hace que el trabajo y el bienestar de las mujeres mayores sean vitales para el desarrollo de comunidades enteras.
El proyecto de Justicia y Derechos Económicos incluido en el borrador de las hojas de ruta de las Coaliciones de Acción presentado en el Foro de México podría ser mucho más sólido si reconociera el papel que desempeñan las mujeres mayores. El borrador se compromete a hacer realidad la igualdad económica de género para «las mujeres y las niñas, en toda su diversidad», lo que incluye implícitamente a las mujeres mayores. Pero si realmente queremos acelerar la igualdad económica de género para las mujeres y las niñas, en toda su diversidad, el anteproyecto debe mencionar explícitamente las categorías de diferencia social, incluidas la edad y la discapacidad.
Es importante reconocer cómo estas categorías se interseccionan con el género y cómo esto afecta a la capacidad de las mujeres para asegurar los ingresos necesarios para prosperar en la vejez, vivir una vida digna y autonomía sobre su tiempo. Las desigualdades asociadas a la edad avanzada no son visibles en el borrador y esto debería abordarse en el próximo encuentro.
El empoderamiento económico de las mujeres de todas las edades depende de la transformación de las desigualdades económicas a lo largo de toda la vida y de abordar la acumulación de desigualdades. Sin embargo, las acciones y los compromisos prioritarios carecen en general de una perspectiva de edad.
Añadir a este plan una perspectiva que tenga en cuenta cómo afectan las desigualdades de género en el curso de la vida permitiría a las mujeres y las niñas en toda su diversidad prosperar desde la infancia hasta la edad avanzada, haciendo realidad sus derechos y aspiraciones ahora y en el futuro.
El plan también debería reconocer el impacto de la discriminación por razón de edad, que constituye una poderosa fuente adicional de desigualdad para las mujeres mayores. Deben reconocerse los efectos acumulados y continuos de la discriminación y el impacto de la discriminación por razón de edad como una barrera para la realización de la igualdad económica y los derechos de las mujeres.
Las mujeres mayores siguen siendo económicamente activas, especialmente en los países de ingresos bajos y medios, y continúan trabajando, a menudo, en condiciones difíciles. El trabajo está impulsado por la necesidad económica, pero las mujeres también necesitan mantenerse activas, realizadas y conectadas. Hay que apoyar a las mujeres mayores para que hagan el trabajo que les importa.
Sin embargo, la realidad es que, tras toda una vida de trabajo remunerado y no remunerado, muchas mujeres llegan a la vejez sin haber acumulado los activos asociados al trabajo productivo, como propiedades, ahorros y derecho a pensiones. La falta de protección social les obliga a seguir trabajando en funciones precarias no sólo para su propia supervivencia, sino también para mantener a otras personas a su cargo.
Además, los datos no suelen recoger el trabajo esencial, remunerado y no remunerado, que realizan las mujeres mayores. Es uno de los principales factores que contribuyen a la ausencia de las cuestiones relativas a las mujeres mayores en las políticas y medidas que afectan directamente a sus vidas.
Los datos sobre los tipos de trabajo que realizan las mujeres deben utilizarse para fundamentar las políticas públicas económicas y sociales. Es crucial que se recojan, analicen y utilicen datos desglosados por sexo, edad (en cohortes de 10 años, hasta los grupos de mayor edad) y discapacidad.
Durante el Foro de México se hicieron repetidos llamamientos para que se incluyan voces diversas en el proceso de Generación Igualdad y en la aplicación del plan durante los próximos cinco años. La única manera de garantizar que se escuchen las voces de mujeres diversas, que su liderazgo se haga realidad y que sus derechos económicos y su autonomía se realicen plenamente, como se indica en el plan, es que también a las mujeres mayores participen y estén representadas de forma significativa, especialmente las más marginadas.
El próximo Foro de París se celebrará a finales de junio. Queremos aprovechar esta oportunidad para asegurarnos de que se ofrezca una perspectiva que incluya la edad en la Justicia y los Derechos Económicos.
Es un error no utilizar este proceso, centrado en la sociedad civil, para hacer avanzar la igualdad económica de género para las mujeres y las niñas de todas las edades. Queda mucho por hacer si queremos que la igualdad económica de género sea una realidad para las mujeres y las niñas en toda su diversidad, también las mujeres mayores.
Texto original en inglés.