09/07/2015
«En Zambia, las personas mayores sufren discriminación en la distribución de tierras, el acceso a las hipotecas y a los préstamos», explicó Vicente Mwiche Siwale, de 81 años, miembro fundador de la Asociación de la Tercera Edad de Zambia y ex funcionario. «Están sometidos a conductas degradantes y humillantes, a insultos repetidos y al ridículo. Las acusaciones de brujería les producen un gran dolor emocional y, simplemente por tener el pelo gris y los ojos rojos, pueden ser quemados o acuchillados hasta la muerte”, añadió. «Ha llegado el momento de una convención sobre los derechos de las personas mayores, por lo que los gobiernos, en especial los gobiernos africanos, pueden tomar medidas para proteger a las personas mayores.»
Con el número de personas de 60 años y más aumentando rápidamente en todo el mundo, HelpAge cree que una nueva convención internacional sobre los derechos de las personas mayores es la forma más eficaz de garantizar que todas las personas, ahora y en el futuro, disfruten de sus derechos humanos en la edad avanzada en igualdad de condiciones con los demás.
«Los derechos de las personas mayores siguen siendo invisibles en el sistema internacional de derechos humanos», dijo Bridget Sleap, Senior Rights Advisor de HelpAge International. «Sólo cuatro de las más de 38.000 recomendaciones del Examen Periódico Universal del Consejo de Derechos Humanos han abordado específicamente la discriminación contra las personas mayores.” explicó. «Una nueva convención cambiaría esta situación. Y esta semana en Nueva York, los gobiernos que apoyan la convención esbozarán de forma exacta lo que quieren ver en ella, que derechos necesitan ser protegidos y que tienen que hacer los gobiernos para que esto suceda.»
«La aprobación de una Convención en la región Interamericana hace cuatro semanas, facilita el camino para una convención de la ONU sobre los derechos de las personas mayores, porque todos nosotros, sin importar el lugar donde vivimos, tenemos derecho a la misma protección de nuestros derechos humanos en la edad avanzada», añadió Sleap.
En Vietnam, Pham Tuyet Nhung, de 64 años, pertenece a la Asociación de Vietnam de la Tercera Edad que cuenta con 8,4 millones de miembros. Estará entre las personas mayores que se reúnan con los representantes de los gobiernos en Nueva York y participará en las reuniones del Grupo de Trabajo Abierto de las Naciones Unidas sobre el Envejecimiento. También intervendrá en un acto sobre las experiencias de las personas mayores frente a la discriminación por edad.
Pham Tuyet Nhung explicó que una convención supondría una gran diferencia en las vidas de las personas mayores en su país. «Una convención internacional sobre los derechos de las personas mayores proporcionaría un marco jurídico para los Estados miembros que se comprometan a ponerla en práctica, lo que significa que los derechos de las personas mayores estarán mucho mejor protegidos», dijo.
En Pakistán, Khalid Saeed, de 68 años, es profesor de psicología ya jubilado. También asistirá a la sesión de Nueva York y está muy interesado en profundizar en las estrategias que las personas mayores pueden utilizar para ayudarles a convertirse en ciudadanos productivos y proactivos. «Hay una gran necesidad de identificar los problemas de las personas mayores en todo el mundo y de hacer recomendaciones apropiadas para su empoderamiento», explicó.
Esther Wamera, de 75 años, trabajaba en Kenia en el ámbito bancario y ahora está jubilada. Actualmente trabaja para la Asociación de la Tercera Edad de la Catedral de Todos los Santos y ha llevado a activistas que abogan por los derechos de las personas mayores a diversos ministerios. «Las personas mayores no son atendidas adecuadamente. Los médicos no quieren tocarlas. La mayoría de las veces les dan analgésicos en lugar de la medicación adecuada», explicó. «Con una convención, los gobiernos y los organismos regionales estarán obligados a ratificar nuestra petición mundial para las personas mayores estén presentes en un lugar central de las políticas de los Gobiernos, en las asignaciones presupuestarias y en todas las cuestiones sociales», agregó.
Toby Porter, Director Ejecutivo de HelpAge International, ha dicho: «Las personas mayores han estado en el corazón de este proceso. A través del movimiento Mayores De-mandan Acción, el año pasado, entregaron su petición firmada por 300.000 personas a Mateo Estremé, Presidente del Grupo de Trabajo Abierto de Naciones Unidas sobre Envejecimiento. Es fundamental que las personas mayores tengan la oportunidad de ser parte y de influir en un proceso sobre sus derechos humanos».
17 afiliados de HelpAge están acreditados en el OEWG (Grupo de Trabajo Abierto sobre Envejecimiento, por sus siglas en inglés) y varias personas mayores están siendo financiadas por el Ministerio de Asuntos Exteriores alemán y HelpAge Alemania para que participen en la sesión.