La semana pasada, la Fundación Rey Ardid se sumó a la Mesa Estatal de Derechos y Mayores, creada en 2013. La Mesa desempeña diversas funciones clave, entre las que se incluyen defender los derechos de las personas mayores ante situaciones de abuso o violencia, dar visibilidad a este colectivo en el actual sistema de protección de derechos humanos, luchar contra la discriminación por razón de edad y destacar las contribuciones positivas que realizan las personas mayores a sus familias y a la sociedad en general.
La Mesa está constituida en la actualidad por un total de 24 organizaciones de toda España, tras la incorporación de la Fundación Rey Ardid, dedicada especialmente a personas afectadas por enfermedades mentales, a personas mayores con Alzheimer u otras demencias, y a diversos colectivos que viven al borde de la exclusión social. Este grupo de trabajo apoya firmemente la elaboración, adopción, ratificación e implementación de una convención de las Naciones Unidas sobre los derechos de las personas mayores que proporcionaría un marco legal más claro y ayudaría a los gobiernos, al sector privado, a la sociedad civil y a otros sectores en la toma de decisiones dirigidas de forma positiva a la población más envejecida.
Actualmente vivimos un momento clave en el cual es importante que cada vez más actores se unan a la defensa de las personas mayores desde un enfoque de derechos y hablen de la necesidad de una convención internacional para que sus derechos sean exigibles.
De acuerdo con la UNECE/ONU, en el año 2045, las personas mayores de 60 años superarán al número de menores de 14 años en el mundo. Y ante este escenario, esta convención aumentaría la visibilidad de los problemas específicos del colectivo. El propósito de un nuevo instrumento jurídico internacional de los derechos humanos es promover, proteger y asegurar el disfrute pleno e igualitario de todos los derechos humanos y libertades fundamentales de todas las personas mayores, así como promover el respeto de su dignidad inherente.
La adhesión de la Fundación Rey Ardid a la Mesa constituye un avance significativo en su compromiso por fomentar un reconocimiento de los derechos de las personas mayores, su completa inclusión social y el reconocimiento del envejecimiento como una experiencia positiva.