«Mi nombre es Habiba Ali, tengo más o menos 70 años y he vivido toda mi vida en Somalia. He llegado aquí en el campo de refugiados de Dadaab en Kenia hace 4 dias.
«Hoy no he podido acceder a la distribución de alimentos. La gente estaba luchando para conseguir la comida y los suministros. El sol calentaba demasiado y me empujaron. Incluso le dieron primero a los hombres y nosotras, las mujeres mayores, tuvimos que esperar al sol y en el polvo.
«No recibí nada.»
«Según se iban abriendo camino yo tenía más miedo de salir lastimada. Así que no recibí nada. Todavía tengo la tarjeta y espero que sea válida mañana. Decidí salir, pensé que mi salud era más importante que la poca comida que daban.
«Mi esperanza es encontrar la paz en esta zona y que haya más agencias que ayudan a las personas vulnerables, sobre todo mayores como yo, que no recibimos asistencia especial.
«Espero que llegue las temporadas de lluvia, rezo a Alá todos los días. Aunque echo de menos la vida nómada, no me queda nada en Somalia.
«Toda mi familia está aquí ahora y no tenemos animales o tierra en Somalia. Me temo que nunca podrá volver. Espero que la vida aquí esté en paz y que pueda ver crecer a mis nietos».
¡Actúa ahora y apoya a las personas mayores en emergencias!
El 20 de febrero, lanzamos la campaña INJUSTO para asegurarnos de que las personas mayores reciben la parte de la ayuda humanitaria que les corresponde. Pero necesitamos tu ayuda.
Esto es lo que puedes hacer:
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