12/03/2016
(c) Claire Catherinet/HelpAge InternationalMientras Europa da vergonzosamente la espalda a esta crisis y cierra sus fronteras, El Líbano se ha convertido en el hogar de más de 1.5 millones de refugiados sirios quienes representan actualmente y aproximadamente el 25% de la población libanesa , de los cuales, 2.6% son personas de más de 60 años.
La llegada de nuevos refugiados con necesidades sanitarias a la región, ha hecho que la asistencia médica tenga dificultades para acoger y asistir a los pacientes.
La demanda de estos servicios es muy alta, y los refugiados mayores muchas veces no se encuentran entre las prioridades de las intervenciones sanitarias de Naciones Unidas o de las ONGs.
Desde HelpAge queremos recordar que uno de los principios sobre los que se han desarrollado los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible es la importancia de «no dejar a nadie atrás», haciendo hincapié en que los más vulnerables, como son las personas mayores, suelen ser aquellos que tienen más posibilidades de sufrir ese olvido.
Recientes cambios en las leyes sobre residencia de El Líbano hacen que muchos de ellos se encuentren incapaces de acceder a servicios de salud pública, haciendo que toda su atención sanitaria dependa de organizaciones humanitarias.
HelpAge lanza un programa de salud para atender a los refugiados sirios mayores en el Líbano
HelpAge International ha estado trabajando con los refugiados mayores sirios en el Líbano desde 2013.
La última investigación publicada por HelpAge Internacional y Handicap International proporciona nuevos datos que muestran lo mucho que los mayores refugiados sirios de Jordania y Líbano, que sufren alguna discapacidad o que están heridos, luchan para poder cubrir sus necesidades específicas.
El 54% de los refugiados mayores padece al menos una enfermedad no tranmisible como la diabetes o el cáncer.
El 65 % de los refugiados de mayor edad presentan signos de angustia psicológica (miedo, rabia, depresión y sentimientos de desesperanza), siendo este porcentaje es tres veces mayor que el que refleja la población refugiada de otras edades.
Las causas principales de esta angustian son: experiencias traumáticas, falta de sentimiento de rutina, aumento de la inseguridad y sentimiento de pérdida de la dignidad y de sus orígenes.
Desde HelpAge International se insististe en que una respuesta efectiva a la crisis humanitaria siria debe reconocer las necesidades específicas de las personas mayores.
HelpAge sigue asistiendo en esta crisis y lanza un nuevo proyecto para dar apoyo sanitario y cubrir las necesidades de los más mayores.
Este proyecto mejorará el acceso a tratamientos para enfermedades crónica y no trasmisibles como la diabetes o la hipertensión, asistiendo a aproximadamente 2.000 refugiados mayores al mes.
«Mientras el conflicto entra tristemente en su sexto año, desde HelpAge International vemos que las personas mayores siguen siendo los grandes olvidados en esta crisis humanitaria», sostiene Toby Porter, director ejecutivo de HelpAge International. «Para que la respuesta internacional sea efectiva, necesitamos que contemple las necesidades de las personas mayores».
Las personas mayores no pueden huir a Europa
El conflicto ha provocado el mayor movimiento de desplazados y refugiados desde la Segunda Guerra Mundial con 4.8 millones de refugiados registrados y 6.5 millones de personas desplazadas internamente, pero hay muy pocas personas mayores entre los refugiados que llegan a Europa.
Aunque no existen datos oficiales, desde HelpAge Alemania, se habla de que menos del 1% de los refugiados que han llegado a ese país tienen más de 65 años.
Son muy pocos los que se encuentran en condiciones de embarcarse en un viaje tan peligroso.
Muchos se quedan atrás cuando sus familias huyen porque no pueden llevarlos consigo.
De acuerdo con Naciones Unidas hay 13.5 millones de personas dentro de Siria que necesitan ayuda humanitaria y las personas mayores se encuentran entre los grupos más expuestos a sufrir olvido en la prestación de la ayuda, pobreza y problemas de salud .
«Las personas mayores a menudo se ven forzadas a separarse de sus familias en situaciones de conflicto, son los más jóvenes los que tienen las fuerzas para huir, y los mayores, que se quedan, se encuentran con dificultades para cubrir sus necesidades básicas de alimentación, agua y salud», sostiene Frances Stevenson, responsable del equipo humanitario de HelpAge International.
«Sin familia, son extremadamente vulnerables».