01/06/2015
Escribo esto en el vuelo de regreso de Nepal a Londres, después de una visita rápida de tres días. Hace poco más de un mes del terrible terremoto que azotó Nepal, el 25 de abril, y he viajado allí con Sola Mahoney, un miembro de la Junta Directiva de HelpAge Internacional.
Queríamos ver de primera mano, la situación a la que se están enfrentando las personas mayores después del desastre y tratar de entender cuáles serán los retos del futuro. Por encima de todo, también queríamos agradecer a nuestro equipo y a nuestros socios sus increíbles y valerosos esfuerzos para ayudar a las personas más afectadas.
Daños significativos.
Equipo de HelpAge en Nepal
Ellos han estado trabajando de forma constante, a pesar de que muchos tienen sus propias casas destruidas. Algunos han perdido amigos y familiares y todos han vivido un mes angustioso, con un segundo terremoto y réplicas constantes día y noche. También quería dar las gracias a nuestros socios en todo el mundo que se reunieron con tanta rapidez para recaudar fondos para nuestra respuesta.
En nuestro primer día en Nepal el equipo nos llevó a un suburbio de Katmandú. Los daños eran muy significativos y se estima que una de cada diez casas sufrió daños graves o quedó totalmente destruida. Hablamos con un grupo muy numeroso de personas mayores en el que todos habían visto sus casas destruidas o seriamente dañadas. Ahora están viviendo en tiendas de campaña o en casas de familiares o amigos cercanos.
Al día siguiente, nos dirigimos a un pueblo de las afueras de Bhaktapur, en las colinas de la ciudad. Obviamente, se trata de un área mucho más pobre donde muchas más casas estaban destruidas. De nuevo, hablamos con un grupo de personas mayores acerca de su experiencia, esperanzas y preocupaciones de cara al futuro.
Experiencias de las personas mayores en el terremoto.
Nos invitaron a visitar una de sus casas, o lo que quedaba de ella. Es muy triste, pero también muy inspirador, ver lo rápido que se había instalado la familia en un refugio temporal utilizando láminas de zinc rescatadas de los escombros de sus casas.
Hablamos con la mujer de 90 años que vive allí y nos comentó que le habían ayudado a salir de su casa un segundo antes de que se derrumbara. En Nepal, hay más de 750.000 edificios completa o parcialmente destruidos o con la infraestructura en estado crítico, como puentes, hospitales y escuelas.
En ambos lugares, todos los hombres y mujeres con los que hablamos habían recibido 67€ (75 USD) en moneda local a modo de transferencia por parte de HelpAge para ayudarles a comprar bienes esenciales para una semana o dos. La ventaja del dinero en efectivo sobre los paquetes de alimentos o artículos de higiene es que son los propios afectados quienes determinan sus propias prioridades en un momento tan difícil, ya se trate de alimentos, medicinas, materiales para refugio o, como en uno de los casos, yendo a la tienda de caramelos con sus nietos por primera vez desde el terremoto.
La reconstrucción llevará tiempo y dinero.
Mujer mayor en NepalTodos nuestros interlocutores están extremadamente contentos con la distribución del dinero y con la forma en la que ha llevado a cabo. HelpAge está en el camino de facilitar dicho pago a 10.000 familias con una persona mayor en el hogar y estamos muy orgullosos de ser la primera agencia en llegar a miles de familias con este tipo de ayuda.
Podemos estar orgullosos de ello, pero no debemos hacernos ilusiones de hasta donde podremos llegar. A una familia le costará cientos de euros comprar los materiales para construir una casa muy básica en una zona rural. En pueblos y ciudades, reconstruir una casa podría llegar costar más de 9.000€.
Se necesitan importantes compromisos para responder a las necesidades.
Si se multiplica esto por el número de viviendas destruidas y dañadas, se puede ver el tremendo desafío que supone para la población y el Gobierno de Nepal, así como para la comunidad internacional. Esto es lo que estuvimos discutiendo con el Jefe de la ONU en Nepal, Jamie McGoldrick.
Los donantes internacionales tendrán que facilitar enormes sumas de dinero para el proceso de recuperación en Nepal, para reconstruir las casas, las escuelas y los centros de salud que se han perdido. Sin embargo, la ONU ya está advirtiendo que, incluso en la fase de emergencia actual, no están viendo nada parecido a los compromisos que realmente habría que asumir. Es una imagen muy preocupante, y por supuesto, lo peligroso es que las familias más pobres y marginadas, en las que en muchas de las cuales vive una persona mayor o incluso es el principal soporte familiar, serán abandonadas a su suerte.
Plan de apoyo a las personas mayores a largo plazo.
En un entorno de este tipo, con recursos limitados, el equipo de HelpAge y nuestros socios en Nepal tendrán que defender sin descanso los programas de socorro y recuperación más apropiados para satisfacer las necesidades de las personas mayores.
Sola y yo nos fuimos con una idea más clara acerca de cuáles debían ser las prioridades de la política a largo plazo en Nepal para las personas mayores. Además, tenemos el privilegio de trabajar con dos de las principales organizaciones de Nepal en esta área, National Senior Citizen’s Federation y Ageing Nepal. En los próximos meses, trabajaremos con nuestros socios para integrar nuestros proyectos de recuperación y apoyo humanitario a largo plazo, destinados a la población mayor de Nepal.