04/06/2014
Refugiada en Sudan del Sur(c) Christian Als/Dansk FlygtningehjælpEn 2011 Sudán del Sur se convirtió en la nación más joven del mundo. Han pasado dos años desde su independencia y muchos retos aún permanencen: la mitad de la población vive por debajo del umbral de la pobreza y sólo el 55% tiene acceso a agua potable.
La lucha comenzó en 2013 tras los enfrentamientos entre el Presidente y el Vicepresidente y derivó en violencia entre las fuerzas del gobierno y las facciones políticas rivales, así como en asesinatos masivos entre etnias.
Esta ola de conflictos ha dejado cerca de un millón de personas desplazadas. Alrededor de 300.000 personas han huído hacia los campos de refugiados de los países vecinos, Sudán, Etiopía y Kenia.
Se estima que alrededor de 3,2 millones de personas necesitan actualmente ayuda humanitaria.
Las necesidades de los refugiados mayores
Para averiguar aquello que supone una necesidad más urgente entre la población de personas mayores llevamos a cabo grupos focales con personas mayores desplazadas a nivel internaciona (IDPs) en Juba.
Además también nos reunimos con representantes de las organizaciones internacionales que trabajan con desplazados. En febrero de 2014 también llevamos a cabo una rápida evaluación entre los refugiados de Sudán del Sur que encuentran en Etiopía occidental y en el Norte de Uganda.
Se realizaron grupos de discusión focales y entrevistas individuales con personas mayores y adultos con discapacidad así como con otros grupos vulnerables tanto dentro de las comunidades de refugiados como las comunidades de acogida.
Las conclusiones extraídas de estas valoraciones fueron que las necesidades de los hombres y mujeres mayores y de las personas con discapacidad estaban siendo olvidadas y mal abordadas por las agencias humanitarias.
Próximas actuaciones
En estos momentos estamos planificando nuestro trabajo a través de nuestro socio local, la Organización de Sudán del Sur para personas mayores (SSOPO) que apoya a este colectivo durante el conflicto actual.
Nuestro plan de trabajo incluye:
En Sudán del Sur:
• Entregar utensilios básicos y esenciales como colchones, mantas así como elementos para la ayuda visual y de movilidad a 2.300 personas mayores.
• Asegurarse de que 1.500 personas mayores cuentan con un mejor acceso a los servicios básicos a través de, por ejemplo, la construcción de 14 letrinas adaptadas.
• Mejorar los cuidados oftalmológicos de 800 personas mayores dentro del colectivo de desplazados en Juba.
• Mejorar el bienestar mental de 2.300 personas mayores a través del establecimiento de un centro social que facilite apoyo psicosocial.
• formación de los actores humanitarios para que entiendan las capacidades y vulnerabilidad de las personas mayores en situaciones de emergencia.
En Etiopía:
• Distribución de elementos esenciales como ayudas por discapacidad, ropa de cama, mosquiteras y sillas de ruedas a 1.500 refugiados mayores.
• Formación de 20 cuidadores a domicilio que darán apoyo psicosocial para mejorar el bienestar mental de las personas mayores.
• Promover los derechos de las personas mayores y su acceso a los servicios esenciales a través de un trabajo de incidencia política.
• formación de los actores humanitarios para que entiendan las capacidades y vulnerabilidad de las personas mayores en situaciones de emergencia.